Resulta todavía más desesperante que la inversa, la de no llegar a tiempo. (El equivalente de 'hacer esperar'.)
La espera genera ansiedad, incertidumbre. Miedo a que los minutos no pasen, a que el reloj se detenga en un punto muerto.
Son veinte, cuarenta minutos, una hora como mucho. Pero el tiempo no pasa más y la espera desespera.
[27.12.08, 05.40 am]
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